Juan Pablo Garza: La cotidianidad es una naturaleza muerta
El Universal 30 Enero de 2014
La cotidianidad es una naturaleza muerta
Juan Pablo Garza inaugura el domingo «Sin título con color amarillo» en el G6.
Objetos, historias y procesos que han acompañado a Juan Pablo Garza (Maracaibo, 1980) emergen del espacio, constituidos en una suerte de vanitas. Piedras, esponjas, cabillas, alfombras y pedazos de madera, despojados de toda vacuidad, componen cerca de 40 piezas del género de las naturalezas muertas, en la muestra SIN TÍTULO CON AMARILLO que inaugura hoy en el galpón G6 del Centro de Arte Los Galpones.
Con la exposición del artista venezolano, la galería Oficina #1 estrena su nueva sala alternativa. «Utilizo esta representación artística como soporte para ordenar mis ideas y esos pensamientos que nacen del contacto con el mundo. La naturaleza muerta como instrumento para reflexionar sobre mi relación con el arte y mi manera de experimentar con la cotidianidad», comenta el ganador del primer premio en la XII edición del Salón Jóvenes con Fia (2010).
Para el creador marabino, esa relación con los objetos inanimados está ligada a lo doméstico. En sala, exhibe pinturas, fotografías, esculturas y ensamblajes elaborados a partir de trapos de cocina, esponjas, y botellas. «Algunos acaban convirtiéndose en frutas; son piezas que evocan elementos colocados sobre la mesa. No hay una cuestión fetichista del objeto, yo lo que veo en ellos es su potencialidad», dice Garza.
Para el creador marabino, esa relación con los objetos inanimados está ligada a lo doméstico. En sala, exhibe pinturas, fotografías, esculturas y ensamblajes elaborados a partir de trapos de cocina, esponjas, y botellas. «Algunos acaban convirtiéndose en frutas; son piezas que evocan elementos colocados sobre la mesa. No hay una cuestión fetichista del objeto, yo lo que veo en ellos es su potencialidad», dice Garza.
El artista experimenta con retazos de tela. Trozos que en un principio utilizó como un sin fin fotográfico, hoy sometidos a un vaciado en yeso o expuestos al sol, yacen enmarcados, y hasta los restos de su antigua casa germinan en una nueva estructura. «SIN TÍTULO CON AMARILLO desencadena un entramado de conexiones (…), un punto de encuentro entre las inquietudes presentes en la corta, pero abundante obra de Juan Pablo Garza«, concluye el texto curatorial.
jmoron@eluniversal.com
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